España tendrá que conformarse con la medalla de plata de fútbol playa en estos Juegos de Minsk, al caer ampliamente derrotado por 3-8 ante Portugal, que tuvo su gran día ante nuestra selección, uno de sus más fuertes rivales. Y es que Portugal, España y Rusia suman entre las tres selecciones cinco entorchados de la Liga Europea de Futbol Playa. Vamos, que entre ellos se reparten el pastel. Así que cualquier cosa podía pasar.
Comenzó España muy fuerte la final, poniendo el 2-0 en el marcador gracias a los tempraneros goles de Llorenc (1’) y Torres (6’), con los que se llegó al final del primer periodo. Y hasta aquí llego el acierto de cara a la portería contraria.
Pero los encuentros de futbol playa no son como empiezan, sino como acaban. Y para España acabó muy mal. A los dos goles tempraneros de España, le siguieron los de Portugal, en el segundo periodo, para poner el empate en el marcador. Y a los 9’ de este segundo periodo los lusos se adelantaron en el marcador. Y falta de unos segundos para acabar el tiempo se adelantaron nuevamente en el marcador, dejándolo en 2-4 para el tercer y último periodo.
Las cosas no pintaban nada bien para el combinado nacional, pues nada más iniciarse el último tiempo, Portugal volvió a aumentar su ventaja, colocando el 2-5 en el marcador y dejando al equipo de Joaquín en una situación mucho más que comprometida. A tenor de la experiencia de los portugueses, hacerles tres goles en este último periodo se antojaba tarea mucho más allá de lo difícil. Y los españoles acabaron por bajar los brazos ante el vendaval luso que dejó el marcador final en un inapelable 3-8 que cerraba cualquier atisbo de milagro.